El actor británico, Alan Rickman, muy popular por su rol como Severus Snape, interesante personaje de la internacionalmente conocida Saga de Harry Potter; nació, el 21 de Febrero de 1946, en Londres.
Su carrera, la cual inició en el teatro, le permitió incursionar en Hollywood, y alcanzar el éxito.
A sus 26 años, se postuló a una beca en la Royal Academy of Dramatic Art o RADA (Londres), y fue aceptado, tras una impecable interpretación de Ricardo III, de William Shakespeare.
Pronto, Alan pasó del teatro a la televisión, y en 1978, interpretó a Teobaldo, en Romeo y Julieta; una miniserie que transmitieron por la BBC.
Su talento lo llevó a destacar en Rasputín, película de tv, con la que consiguió un Emmy y un Golden Globe; lo que, sin duda, lo internacionalizó.
Alan logró pasar de la Royal Shakespeare Company, dando un salto a la pantalla grande, con Die Hard (1988), dirigida por John McTiernan. Este film estadounidense le dio inicio a una alabada carrera cinematográfica.
Entre sus films más populares está Sentido y sensibilidad (1995), Sweeney Todd (2007), y el rol que lo popularizó en la saga de Harry Potter, donde interpretó al inolvidable personaje: Severus Snape.
Este oscuro, pero heroico personaje, le fue entregado por la misma autora de la historia, su compatriota J. K. Rowling, quien lo admiró siempre. Rowling siempre le dió a Rickman detalles exclusivos de qué ocurriría en la trama de los populares libros llevados a la pantalla grande.
(Photo by Evan Agostini/Invision/AP)
Rickman también trabajó como director en películas como El invitado de invierno (1997), con las actuaciones de Emma Thompson y Phyllida Lawy y, en A Little Chaos (2014), protagonizada por Kate Winslet. Todo esto, sin jamás abandonar el teatro.
Para el año 2005, el talentoso británico estuvo tras la obra My Name is Rachel Corrie, trabajo que dirigió junto a la actual editora en jefe, del medio The Guardian, Katharine Viner, y que se basó en los correos electrónicos de una estudiante estadounidense que viajó a la Franja de Gaza, donde fue asesinada por las Fuerzas de Defensa de Israel en 2003.
Tristemente, el mundo del teatro, cine y la televisión recibió la noticia del fallecimiento del actor británico a sus 69 años, tras una larga lucha contra un cáncer de páncreas.
Su talento siempre será extrañado y su esfuerzo recordado. Rickman es el vivo ejemplo de cómo un inmigrante puede lograr el éxito rotundo en los Estados Unidos.
Así como Rickman, son innumerables los artistas de origen extranjero que han logrado el éxito en Hollywood. Si eres un artista con habilidades extraordinarias para el teatro, la actuación y las artes escénicas, puedes aspirar a una visa O1 con la cual podrás trabajar en los Estados Unidos, y posteriormente aspirar por la ciudadanía.
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